jueves, 11 de febrero de 2016

No Recomendable


Llegamos de casualidad al concierto de Mar de copas en La Noche de Barranco, no sabíamos que esa noche tocaban y estar paseando por Barranco a esas horas nos cayó perfecto. Compramos las entradas a cincuenta soles cada una, el vendedor nos dijo algo no muy claro que con tanta bulla no entendimos, no me percaté que no había acceso por donde siempre entraba pues todo estaba cerrado.
Subimos por la izquierda, sólo estaban las mesas del bar y tres chicos desapercibidos , quisimos ingresar pero otros dos chicos nos pidieron las entradas, no entendí la redundancia pues acabábamos de comprarlas, me demoré tanto en sacarlas que nos hicieron pasar sin mostrárselas.
Estabas tocando tú.
En realidad estabas hablando, le pregunté a mi novio si te conocía y estaba igual que yo, confundido pero no parecía importarle, ya estábamos adentro y disfrutando tu show.
Escuché 1, escuché 2, escuché todas tus canciones con mucho interés.
Me enamoré–de tu música-me encantó todo, tienes un sello personal muy interesante, me emocionaron muchas de las canciones que escuché ese día, no niego que retrocedí en el tiempo al escuchar de desilusiones, desamores, despecho y coraje.
Todo lo que dijiste me encendió, todo fue bien corajudo, bien contundente y sincero, no me sentía así desde hace muchísimo tiempo. Estaba presente la idea de googlearte cuando termine tu tocada, lo hice (descubrí que mi novio se adelantó en hacerlo por su lado).
A veces, las casualidades al parecer sin importancia son las más importantes en nuestra vida. A raíz de todo lo que te menciono se ha creado (he creado) algo así como un símbolo de la relación que tengo con él, a raíz de tus canciones aprendimos a ser menos ilusos y más realistas. Eres nuestro descubrimiento simultáneo, un grato descubrimiento que me alegra y alivia no haber conocido antes.

Dijiste que cerrabas los ojos porque la luz del reflector se dirigía directamente a tu  rostro, no creo eso, sabes, yo creo que uno siente lo que el otro transmite y tú: tus canciones: transmiten demasiado.

El amor eres tú.

Han pasado tantas cosas en mi vida en cuestión de amores…tantas cosas que no tengo ningún reparo en recordarlas cuando la ocasión lo amerite, esta es una de ellas por ejemplo.
Los años pasan y hoy siento que tanto la vida como el destino observan cada paso que doy con mucho detenimiento, observan que me dieron, que me quitaron y que me brindan hoy.
No me siento triste, sólo es nostalgia.
Tengo ganas de vivir mucho, tengo ganas de ser feliz y es muy curioso que a mi lado, al pensar de ese modo, tenga omnipresente a aquella persona que me complementa, con sus altas y bajas, con sus berrinches de domingo en la mañana, con su rosa roja algo quebrada por el trayecto de la carretera, con su tono sarcástico en momentos inapropiados, pero sobre todas las cosas con su absoluta transparencia.
Sólo Dios sabe cuántas cualidades tiene en el alma que hace que me sienta la más afortunada de todas.
Siento que valió la pena cada uno de los segundos que he observado, conocido, vivido, sufrido y experimentado del amor y la vida.

 Absolutamente todos valieron la pena.

Lucas y Montoto - Morena

Ha de ser una maravilla salir de picnic con amigos músicos, lo digo porque no tengo amigos músicos. Ha de ser una cosa impresionante tener...